In English | WASHINGTON—Una reciente encuesta de AARP revela que un alto porcentaje de adultos latinos mayores de 50 años en el país tiene dificultad para acceder a una conexión de alta velocidad a internet o no puede pagar por el servicio. Según la consulta de opinión, el 20% de los adultos mayores de 50 años del país no tiene acceso a ningún tipo de conexión a internet y el 63% dice que el elevado costo de la banda ancha a alta velocidad es un problema. Los hallazgos subrayan el impacto potencial del nuevo programa Beneficio de Emergencia para Internet (EBB) banda ancha de emergencia lanzado en días pasados por la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC). AARP urge a todos los adultos mayores del país que tienen dificultad para acceder a una conexión a internet de alta velocidad o no pueden pagar por el servicio, a que se inscriban en el programa hoy mismo.

“La pandemia ha demostrado que el acceso a una conexión de alta velocidad a internet no es un lujo sino una necesidad. Las personas que no pueden acceder a este servicio están quedando marginadas del acceso a cuidados de salud, empleo, educación y contacto con sus seres queridos”, dijo Nancy A. LeaMond, vicepresidenta ejecutiva y directora de Activismo Legislativo y Compromiso de AARP. “AARP apoya enérgicamente el programa Beneficio de Emergencia para Internet (EBB) y continuará abogando en favor de políticas que ayuden a cerrar la brecha digital que ha dejado a millones de adultos mayores sin acceso a internet”, añadió.

De acuerdo con un reciente informe de Older Adults Technology Services (OATS) que forma parte de la iniciativa Aging Connected, de AARP, elaborado en colaboración con Humana Foundation, más de 22 millones de adultos mayores de 65 años carecen de una conexión de banda ancha a internet en casa, muchos de ellos, latinos . El programa EBB busca ayudar a los hogares que se ven en dificultades para poder pagar por el servicio de internet de alta velocidad durante la pandemia de COVID-19. El programa permanecerá en efecto hasta que se entregue la totalidad de los $3,200 millones asignados, y no más de seis meses después de que el Gobierno federal haya declarado el fin de la pandemia.

Para obtener recursos y más información en español, visita aarp.org/FCCSubsidioInternet o llama al 1-833-511-0311.

A través de este programa de corto plazo, muchos hogares son elegibles para un descuento en su cuenta de internet de alta velocidad de hasta:

• $50 mensuales para servicios de internet de alta velocidad.
• $75 mensuales para servicios de internet de alta velocidad para hogares en territorios tribales.
• Un descuento único de hasta $100 para la compra de una tableta, computadora portátil o de escritorio a través de un distribuidor participante.

Quienes hayan sufrido reveses financieros durante la pandemia de COVID-19 o estén teniendo dificultades para mantenerse a flote económicamente podrían reunir los requisitos para el programa EBB si:

• Califican para el programa Lifeline o se benefician de programas de asistencia federal, como Medicaid y SNAP, o reciben beneficios de la SSI.
• Han sufrido una pérdida de ingresos sustancial a partir del 29 de febrero de 2020 y sus ingresos familiares totales el año pasado estén por debajo de los $99,000 si declaran impuestos de forma individual o $198,000 si lo hacen de forma conjunta.
• Cumplen con los requisitos de los programas para personas de escasos recursos por causa de la pandemia de COVID-19 ofrecidos por las compañías participantes que suministran servicios de internet.

AARP tiene una larga tradición de ofrecer recursos sobre dispositivos de tecnología personal. Como parte de nuestro servicio de alfabetización digital, OATS ofrece clases sobre el tema, además de recursos y eventos a través de su programa insignia Senior Planet, que forma parte esencial del Centro Comunitario Virtual de AARP, un destino en línea disponible igualmente a los socios y no socios de AARP. OATS empodera a los adultos mayores para que superen las barreras que les impiden la participación digital a través del desarrollo de destrezas y confianza necesarias para que utilicen la tecnología y se mantengan conectados.